CONTRIBUCIÓN DE LA ENSEÑANZA ESCOLAR CATÓLICA A LA FORMACIÓN HUMANA
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Resumen
La Enseñanza Religiosa en la escuela significa es en sí misma una contribución potencial en tres niveles:
1. Pone de relieve al hombre religioso: presentando la experiencia religiosa como una dimensión de la persona; exponiendo el hecho religioso como un humanismo original, capaz de responder a las preguntas sobre el sentido de la vida, y ofreciendo una rica herencia cultural, cuyo gran código es la Biblia.
2. También, en su proceso de comunicación, hace posible un método de documentación, confrontación y diálogo, apto para superar integrismos y contribuir de manera eminente al encuentro interreligioso e intercultural imperante, proponiendo para ello la figura del hombre sabio, capaz de diálogo y de discernimiento.
3. Finalmente la relación educadora, que debe animar la escuela, tiene en la Enseñanza Religiosa (ERE) un fundamento similar a su identidad religiosa para el hombre, configurándolo como hombre de comunión.