La planificación universitaria como patrimonio: el caso del Plan Masa de la UNAE (Ecuador)

Resumen

La planificación de una universidad aporta un equilibrio entre cambio y continuidad. En la escala urbanística, se ha ido consolidando históricamente como aval de una génesis y evolución sin distorsiones. Si el estilo arquitectónico identificaba el pasado (desde la tipología claustral medieval), la planificación urbanística caracteriza la contemporaneidad, donde el campus estadounidense emergió como paradigma. Existen tres rasgos de la actitud planificadora que justifican su trascendencia: permitir su perdurabilidad sin contradicciones: optimizar la vinculación coordinada entre las comunidades académica y urbana; y crear escenarios donde disfrutar de experiencias motivadoras, tanto en la vivencia como en la activación de relaciones visuales con los integrantes del conjunto (volúmenes arquitectónicos y espacios libres). Es pertinente defender el valor de la planificación urbanístico-arquitectónica como patrimonio, pues ordena en el tiempo y el espacio el organismo universitario, aportando significados, y afianzándose como sustento de un progreso coherente. Tal virtud está presente incluso cuando la resolución arquitectónica acaba derivando hacia pautas estilísticas no previstas originalmente. La planificación urbanística trasciende al detalle estilístico de los edificios, pues pertenece a una entidad estructural superior. Esta relevante característica se ilustra en este artículo con el Plan Masa para el Campus de la Universidad Nacional de Educación (UNAE, Ecuador).