Impacto del diseño urbano en la calidad del aire: modelos arquitectónicos urbanos basados en espacios exteriores confinados

Resumen

El fluir del aire entre edificios a través de los espacios exteriores condiciona su calidad mediante el consecuente proceso continuado de contaminación. Parámetros como la densidad de población, la presencia de industrias o el tráfico influyen notablemente sobre el proceso de degradación del aire. Se propone un método numérico validado experimentalmente capaz de evaluar la idoneidad de un diseño urbano con respecto a su capacidad para proveer al interior de los edificios la calidad del aire óptima para sus ocupantes a través de los espacios exteriores confinados. Se definen 8 posibles espacios exteriores según su posición con respecto a los elementos construidos, acotándose lateralmente por los planos envolventes de los edificios contiguos y cuya elevación asciende hasta la cota de cornisa. Este trabajo se ha centrado en buscar un procedimiento capaz de analizar la calidad del aire exterior según el tiempo que pasa desde que accede al entorno urbano en una situación ideal de pureza y el tiempo que tarda en ser suministrado a los edificios. En general, los resultados alcanzados demuestran que los espacios exteriores confinados que se encuentran expuestos a la acción eólica tienen mayor predisposición a reducir la edad media del aire que contienen. Para los casos analizados, puede obtenerse una mejora considerable, de hasta el 78,68% en la calidad del aire que se recibe en los edificios desde los espacios exteriores confinados, atendiendo a criterios de exposición al viento en relación a su forma y densidad urbana.