Ciudades y arquitectura de tierra en el sur de Marruecos. Reflexión sobre la restauración y conservación

Resumen

La arquitectura de tierra, tapial, y los conjuntos por ésta formados que están situados en Marruecos, principalmente al sur del Atlas, generalmente se conocen con el denominador común de Kasbas. En realidad tal término, que responde a una tipologia constructiva, suele agrupar modalidades arquitectónicas diferentes por su función aunque semejantes en formas, como son los tigremt, kasba, ksour e ighrem. El estudio los diversifica destacando los rasgos constructivos que derivan de sus diferentes funciones. En él se hace una aproximación a su ascendencia y posibles influencias, tanto de otras construcciones de la antiguedad como de las construcciones europeas, subrayando a su vez los aspectos autóctonos propios de la cultura que las ha generado. Ante la carencia de información que permita precisar una datación para estas arquitecturas, se hace una aproximación a las que debieron ser las épocas de preferente actividad constructiva. El trasfondo del estudio es una reflexión sobre la problemática que ofrece la conservación del tapial, y una llamada de atención ante la irreversible y progresiva pérdida de unos conjuntos arquitectónicos que transcienden por sus valores los intereses de un país al merecer la consideración de Patrimonio de la Humanidad. El trabajo, a su vez, es un pretexto para hacer una reflexión sobre el tema de la restauración y conservación de la arquitectura histórica, insistiendo en que la cuestión está planteada desde las carencias de las culturas occidentales. Estas, están trasponiendo a la problemática de culturas arraigadas, puntos de vista que no constituyen sólidas bases conceptuales para afrontar la conservación de una arquitectura inicialmente destinada a su desintegración y en plena simbiosis con tradiciones, hábitos y comportamientos que son valores de unas gentes que, por otra parte, viven en niveles próximos a la miseria. Aqui, y en general en toda intervención restauradora, el riesgo de fosilizar un pasado evocador viene dado de la necesidad de revitalizar un presente desconcertado, el que es propio de las sociedades de occidente, cuando debería ser desde la conciencia de una continuidad histórica.