Los depósitos glaciares del Valle del Aragón Subordán, Pirineo Centro-occidental español.

Autores/as

  • J.M. García-Ruiz
  • C. Martí-Bono

Palabras clave:

Glaciarismo pleistoceno, Fases glaciares, Cubeta terminal, Depósitos glaciolacustres, Aragón Subordán, Pirineos

Resumen

Se estudia la extensión y evolución del glaciarismo del valle del Aragón Subordán (valle de Hecho) durante el Pleistoceno superior, en el Pirineo centro-occidental español. En el momento de máxima extensión de los hielos, el glaciar del Aragón Subordán alcanzó una longitud de 23 km, con el frente de fusión a 830 m s.n.m., una altitud similar o incluso inferior a la de otros valles próximos de gran importancia (Aragón y Gállego, por ejemplo). Sin embargo, aunque la altitud de las cumbres de cabecera es sensiblemente más baja, se vió compensada por la mayor innivación en el valle del Aragón Subordán, debido a su posición más occidental y abierta a los frentes atlánticos. Existen numerosos depósitos morrénicos tanto en el frente glaciar (cubeta de Hecho) como en las laderas del valle y afluentes, así como varios depósitos de origen glaciolacustre. Morrenas laterales y frontales permiten distinguir varias fases de avance glaciar que coinciden con las identificadas en otros valles pirenaicos. Como en otros valles pirenaicos, se distinguen tres cordones morrénicos laterales en torno a la máxima expansión de los hielos, sobre todo en la confluencia con los valles de Agüerri y Acherito. En ese momento el glaciar del Aragón Subordán tenía un espesor de 400 metros antes de llegar a la cubeta terminal de Hecho, y los principales glaciares afluentes estaban conectados con el glaciar principal, especialmente durante el desarrollo de las dos primeras morrenas laterales. En una segunda fase (relacionada muy probablemente con el reavance de hace unos 20,000 años, coincidiendo con el LGM global) la mayor parte de los afluentes estaban ya desconectados y eso explica la reducción en longitud y espesor del glaciar principal. El frente glaciar llegaría hasta la Selva de Oza. Posteriormente, otros reavances menores están bien registrados en el interior de los valles afluentes, identificándose varias morrenas frontales en el valle de Acherito. La ausencia de dataciones locales obliga a establecer comparaciones con otros valles pirenaicos.

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Publicado

2012-05-07

Número

Sección

Artículos de Investigación