Reseñas de libros e informes / Books and Reports Reviews

DOI: 10.22325/fes/res.2022.112

Josefa Ros Velasco (Ed.). Suicide in Modern Literature. Social Causes, Existential Reasons, and Prevention Strategies. Nueva York: Springer, 2021



Andy Eric Castillo Patton * ORCID

Universidad Complutense de Madrid. aecastillopatton@ucm.es

Revista Española de Sociología (RES), Vol. 31 Núm. 2 (Abril - Junio, 2022), a112. pp. 1-4. ISSN: 1578-2824




Émile Durkheim, en su célebre obra El suicidio. Un estudio de sociología, establece que “[c]ada suicida imprime a su acto una huella personal, que expresa su temperamento y las condiciones especiales en las que se encuentra, que, por consiguiente, no pueden explicarse recurriendo a las causas sociales y generales del fenómeno. Pero estas, a su vez, deben imprimir en los suicidas una tonalidad sui generis, una marca especial que las expresa. Esta marca colectiva es la que intentamos encontrar” (1897/2015, p. 241). Esta aseveración, más allá de ciertos sesgos e imprecisiones metodológicas de El suicidio (Alvira Martín y Blanco Moreno, 1998), es clave para entender cuál es el propósito de la Sociología en tanto que ciencia social, distinta a la Filosofía y otras ciencias del comportamiento, en particular la Psicología. Así, según plantea Eduardo Bericat Alastuey (2001), Durkheim bosqueja la Sociología como ejercicio y método por el cual diseccionar y entender la Modernidad. Sobre todo, en aras de poder conducir las incertidumbres que provocan los cambios sociales acelerados y profundos de la industrialización, la urbanización y la secularización, entre otros procesos. A este respecto, Durkheim concibe que es a través del suicidio como mejor se pueden entender las tensiones y convulsiones que experimentan las sociedades modernas, diagnosticándolas en su estado actual de crisis, desintegración y anomia. Para tal cometido de diagnóstico sociológico, se presenta, así, como elemento imprescindible el fijarse en la noción de suicidio como “hecho social”, influenciado por “fuerzas externas” al individuo.

Desde una visión multidisciplinar, pero inevitablemente atravesada de esta perspectiva sociológica, Suicide in Modern Literature. Social Causes, Existential Reasons, and Prevention Strategies, coordinado y editado por Josefa Ros Velasco (Universidad Complutense de Madrid), se propone un ejercicio similar al que Durkheim, Mauss y Halbwachs —y otros clásicos no tan conocidos como Masaryk, Henry y Short, entre otros muchos— desarrollaron para esclarecer el que quizás sea el comportamiento humano más difícil de escrutar en la Modernidad. Más allá de los mitos, tabúes y estigmas que hacen del suicidio una conducta estereotipada e invisibilizada, habitualmente asociada con la psicopatología y los trastornos mentales, el presente volumen se plantea analizar esta conducta a través de la literatura —particularmente europea y norteamericana— en vista de la realización de un ejercicio analítico sobre la representación artística de las principales causas, razonamientos y posibles estrategias aplicadas a su prevención o, mejor dicho, su contención. Para tal propósito, y según el esquema de contención del suicidio en tres niveles de la Organización Mundial de la Salud (OMS) —prevención, intervención y postvención—, este libro se estructura de forma similar en tres bloques o apartados: 1) “Part I. Social Causes of Suicide in Modern Fictional Literature”, 2) “Part II. Existential and Psychological Reasons for Suicide in Modern Fictional Literature” y 3) “Part III. Suicide Prevention Strategies of Modern Fictional Literature”. Con una correspondencia indirecta con las comentadas directrices de la OMS, estos tres bloques se refieren, respectivamente, a las formas por las cuales el suicidio se puede 1) prevenir comprendiendo sus representaciones sociales en el arte literario, 2) intervenir de acuerdo a experiencias y testimonios biográficos, aun con razonamientos novelados; y 3) mitigar su impacto (hacer postvención) en supervivientes y afectados/as a través de la práctica literaria.

Estos tres ejes quedan cubiertos a través de los dieciocho textos —dieciséis capítulos, un prólogo y un epílogo— escritos por autoras y autores ampliamente reconocidos en sus respectivas disciplinas, sean del ámbito de las humanidades, las ciencias sociales o las ciencias cognitivas. De este modo, yendo desde una perspectiva particular a una más general, a través de ejemplos localizados en Norteamérica y Europa se construye un telar analítico acerca de relevantes representaciones sociales del suicidio en la narrativa, la poesía y el teatro occidentales de los siglos XIX, XX y XXI. Sin afán de resultar ejemplos exhaustivos, las imágenes que se plantean acerca del suicidio en América del Norte y Europa se corresponden con la práctica analítica de Dostoievski a través de la cual la literatura se entiende como un espejo tanto del alma individual como colectiva, siendo ineludible la polifonía de sus representaciones discursivas (Bajtín, [1963] 2012). A este respecto, en el prólogo del texto (pp. 20-30) el reputado suicidólogo David Lester plantea la relevancia que tiene la literatura para comprender de forma más nítida y organizada la conducta suicida, pudiendo construir categorías clínicas a partir de hechos ficticios que no dejan de encapsular malestares reales. De este modo, y refiriéndose a tal y como plantea Sigmund Freud la propia constitución del psicoanálisis como una psicología que analiza el relato socio-biográfico, Lester propone una mirada psico-histórica en la que se pueden encontrar diferentes arquetipos y actitudes sociales hacia el suicidio en las producciones literarias. A este cometido se dedican los siguientes textos, recogiendo ejemplos y testimonios concretos acerca del suicidio en un determinado contexto social y época histórica, además de incorporar las reflexiones y experiencia vital del autor/a o grupo de autores analizados.

Es en el aspecto del contexto en el cual la primera parte del libro se centra, sobre todo en torno a cómo se reproducen socialmente unas u otras posiciones acerca del suicidio. Así, en el primer capítulo (pp. 31-47), Jared Stark presenta, particularmente a través de la obra poética y narrativa de Edith Warton, cómo en Estados Unidos se produce el debate sobre la criminalización versus la victimización del suicidio, siendo fundamental el papel de los medios de comunicación en el enardecimiento de dicha discusión. En el segundo capítulo (pp. 48-59), Noelia Hernando-Real, siguiendo en el contexto norteamericano, analiza cómo se representa el suicidio femenino en las diferentes oleadas feministas de la mano de distintas autoras adscritas a las mismas: Susan Glaspell, Marsha Norman y Naomi Wallace. La discusión sobre los derechos sociales y políticos de las mujeres da lugar a una correspondencia metafórica en cuanto a cómo los diversos entornos dramáticos (re)presentan el suicidio femenino como un acto marcado por las luchas y disputas sociopolíticas de cada contexto de movilización y discusión feminista. En el tercer capítulo (pp. 60-82), Katrina Jarowski recoge el testigo de la problematización de género del suicidio en la ficción norteamericana, tomando como ejemplo la obra de Jeffrey Eugenides, Las vírgenes suicidas, y las implicaciones de la mirada masculina en la corporalidad femenina. En el cuarto capítulo (pp. 83-102), Gail Shanley Corso continúa esta discusión acerca de cómo el patriarcado en Estados Unidos ha generado un particular arquetipo del sufrimiento psíquico en las mujeres y su avocación a la tentativa suicida, tal y como se aprecia en la biografía y obra literaria de Norma Jane —alias Marilyn Monroe.

En el quinto capítulo (pp. 103-116), introduciendo la perspectiva europea, Anita Virga plantea la dimensión de clase en el suicidio de acuerdo a las lecturas del realismo italiano (verismo) de autores como Luigi Capuana y Giovanni Verga, quienes presentan una distorsionada imagen burguesa de los suicidas de acuerdo a su estrato social. En el sexto capítulo (pp. 117-125), Juan Godoy Peñas presenta una crítica de la sociedad española del primer tercio del siglo XX a través de la novela satírica Mi suicidio, de Margarita Nelken. Aquí se muestra el suicidio como un acto de denuncia al mismo tiempo que como paradoja ante la doble moral de las sociedades modernas: se rechaza como conducta, pero se elogia su uso artístico. En el séptimo capítulo (pp. 126-138), Angelika Potempa ahonda en esta cuestión del recurso artístico del suicidio como instrumento de denuncia social en el contexto de la República Democrática Alemana (RDA). La novelización del suicidio por parte de múltiples autores del realismo socialista de la RDA se presenta como un testimonio reflexivo donde el sufrimiento social no encuentra espacio de expresión más allá de la visibilización artística. En el octavo capítulo (pp. 139-156), Ricardo Gutiérrez Aguilar prolonga la discusión anterior en el contexto de la RDA. A partir de las paradojas que se encuentran en La vida de los otros, se plantea cómo el Estado debe intervenir ante las pulsiones de muerte auto-infligida. De este modo, a través de esta representación se ponen en tensión las contribuciones tanto de Marx como de Durkheim respecto al deber de la contención pública del suicidio.

En el segundo bloque, dedicado a las experiencias biográficas y los razonamientos que dan lugar al suicidio, en el noveno capítulo (pp. 157-169), Rodolfo Gutiérrez Simón aborda la cuestión existencial que significa el suicidio a través de la obra tanto literaria como filosófica de Miguel de Unamuno. A partir de sus escritos, este acto de muerte voluntaria se entiende como una controvertida posibilidad que pone en cuestión las ataduras morales del individuo. En el décimo capítulo (pp. 170-182), Roberto Risso estudia, por medio de la novela Dissipatio H.G. de Guido Morselli, la cuestión por la cual el suicidio se comprende como un umbral de la conciencia tanto individual como colectiva. Esta reflexión se ve atravesada por una serie de hitos sobre la deseabilidad de la existencia en contextos medioambientalmente degradados y gravemente amenazados por la violencia política. En el undécimo capítulo (pp. 183-197), Barbara Hawellek profundiza en la cuestión socio-existencial del suicidio a través de la mirada clínica y psico-filosófica de Walker Percy, quien esboza esta posibilidad de muerte como un acontecimiento propio de la Modernidad y su laberinto. Sin embargo, se reflexiona a través de la experiencia y obra de Percy sobre la posibilidad de poder significar la vida desde un particular sentido o propósito en el obrar colectivo. En el duodécimo capítulo (pp. 198-207), Robyn Gaier introduce la discusión acerca de la habitual práctica de estigmatización y condena del suicidio como un acto de incorrección moral, sirviéndose para tal cometido de la comprometida obra de William Styron y su defensa de la despatologización de las dolencias mentales.

En el tercer bloque, centrado en las estrategias de prevención y postvención, en el capítulo décimotercero (pp. 208-225), Fazila Derya Agis analiza las fórmulas y metáforas que Paulo Coelho despliega en Verónika decide morir para narrar la construcción de un camino de esperanza y de reconciliación con uno/a mismo/a y la vida tras una tentativa de suicidio. En el decimocuarto capítulo (pp. 226-237), Wouter Schrover ahonda en el debate del suicidio asistido y el suicidio permitido en Holanda por medio de la obra literaria y ensayística de Joost Zwargerman. A través del diálogo biográfico y narrativo se proponen miradas tanto encontradas como comprometidas en torno a las tensiones sobre cómo aceptar el suicidio como derecho y libre elección individual, a pesar de la necesidad de incidir en su prevención activa. En el decimoquinto capítulo (pp. 238-248), Michelle Falkoff considera las perspectivas y estrategias que se emplean en la reciente emergencia de novelas para jóvenes y adolescentes centradas en un acontecimiento suicida. En este análisis documental se distinguen una serie de tipologías y formulaciones que pueden ser tanto perniciosas como valiosas para la prevención y la postvención indicada en dicho grupo de edad. En el decimosexto y último capítulo (pp. 249-261), Andrew Bennet plantea cómo el dolor que deja la pérdida de un ser querido por suicidio se puede novelizar, tal y como lo hace Yiyun Li, en tanto que acto de reflexión pública, así como de terapia individual.

Finalmente, en el epílogo (pp. 262-272), Jeffrey Berman plantea la literatura como un ejercicio de psicoterapia social en el cual poder desarrollar fórmulas de empatía y comprensión con los otros. De este modo, el acto de escribir ficción o ensayo en torno al suicidio se puede plantear como una herramienta tanto individual como colectiva de comprensión de un fenómeno en entornos cercanos como es el caso del aula educativa. Así, Berman sugiere que este ejercicio de sensibilización requiere de protocolos que puedan ayudar a la detección temprana de casos que necesiten de una intervención indicada en múltiples contextos. Esta apuesta se asemeja a la que el filósofo y pensador social Simon Critchely (2016) plantea como método que ensancha tanto la visibilización como la discusión pública acerca del suicidio como un acontecimiento cotidiano. Critchely, narrando su propio caso de ideación y planificación suicida, expresa cómo a través de la escritura creativa y la puesta en común de cómo se redactan las notas de suicidio se pueden comprender mejor los elementos que constituyen un acto que, por sí mismo, se define tanto narrativo como social. El autor británico declara que “el suicida no quiere morir solo, sino en compañía de una o más personas, a quienes la nota va dirigida” (2016, p. 54), aunque en dicha nota haya reproches, culpabilización o venganza hacia los otros.

Estas aproximaciones, retomando el propósito de Durkheim acerca de encontrar la “marca colectiva” que define el suicidio, ponen en consideración una suerte de ejercicio literario de la “imaginación sociológica” en el sentido que la plantea Charles Wright Mills (1959/2000), es decir, descifrar el suicidio por medio de su representación imaginada. Así, aunque una labor parcial, fragmentaria e inconclusa, esta tarea permite recopilar una serie de pistas que se aproximan a las grandes teorías clínicas sobre la causalidad suicida tal y como se plantea con el modelo de diátesis-estrés de Mann, la teoría interpersonal de Joiner o el modelo motivacional-volitivo de O’Connor y Kirtley, por destacar las más relevantes. Este es el propósito que se observa en Suicide in Modern Literature. Social Causes, Existential Reasons, and Prevention Strategies, donde lo teórico y lo experimental encuentran un camino común en la identificación social del suicidio como un acto cuya particularidad no deja de estar atravesada de los condicionantes de un convulso contexto tanto micro, como meso y/o macro. Este volumen es altamente recomendable para diferentes públicos interesados en la sociología del suicidio o en algunas de sus principales discusiones filosóficas y literarias, sin eludir el compromiso de imaginar la implementación de estrategias o políticas complementarias para su detección y prevención. De este modo, este compendio se erige como una imprescindible plataforma de acceso a múltiples perspectivas y lecturas que tienen un mismo propósito: ofrecer pistas para avanzar en el entendimiento de la muerte concebida como más socialmente indescifrable.




NOTAS


* La elaboración del presente texto se desarrolla en el contexto de la adjudicación de un contrato pre-doctoral de personal investigador en formación (CT63/19-CT64/19) adscrito al Programa de Financiación de Universidad Complutense de Madrid - Banco Santander.


REFERENCIAS


Alvira Martín, F. y Blanco Moreno, F. (1998). Estrategia y técnicas investigadoras en El Suicidio, de Emile Durkheim. Revista Española de Investigaciones Sociológicas (REIS), (81), 63-72.

Bajtín, M. M. (2012). Problemas de la poética de Dostoievski. Fondo de Cultura Económica. (Obra original publicada en 1963).

Bericat Alastuey, E. (2001). El suicidio en Durkheim, o la modernidad de la triste figura. Revista Internacional de Sociología (RIS), 59(28), 69-104. https://doi.org/10.3989/ris.2001.i28.743

Critchely, S. (2016). Apuntes sobre el suicidio. Alpha Decay.

Mills, C. W. (2000). The Sociological Imagination. Oxford University Press. (Obra original publicada en 1959).